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“ NEUTRAL SPACES ”


De la fotografía pictórica a la fotografía escultórica.


El proyecto “De la fotografía pictórica a la fotografía escultórica” tiene como objetivo la búsqueda de una expresión de corte formal pictórico a partir de la fotografía.
Más concretamente, me interesa desarrollar esta tendencia de la fotografía contemporánea -denominada por algunos autores como “pictorialismo fotográfico”- utilizando elementos arquitectónicos reducidos a su mínina expresión.
A partir del retrato de elementos de arquitectura como fachadas de edificios e interiores, busco encontrar una cierta abstracción plástica y buscar un desarrollo formal a partir del motivo fotografiado . De este modo, la mirada del espectador se sitúa ante las piezas de la serie , obligada a realizar un esfuerzo cognoscitivo: aparentemente se encuentra ante recreaciones puramente geométricas –formales-, sin embargo al conocer que es fotografía, la mirada busca identificar un espacio real y conocido –fachadas, interiores, etc.- desde lo fotografiado.
Para lograr esto, la estrategia utilizada es una fragmentación del elemento fotografiado, del que a partir de la parte ha de (re)construirse el todo. Tal y como afirma Roland Fischer, “[…] al fragmentar la piel del edificio ,se transforma la arquitectura en geometría, en formas, remitiendo al urbanismo de una sociedad estereotipada y sin embargo espectacular”.

A nivel técnico, el resultado se intensifica con el uso de un soporte de impresión que tiene una carga pictórica muy superior al de otros elementos estándar de impresión –como el papel fotográfico o el metracrilato-: el “dibond”, que me permite subrayar la especificidad de cada plano cromático, permitiendo planos de color casi puro. En el “dibond”, el blanco resulta más blanco, el gris, tonalidad pura.
Esta pureza de los colores, que se presentan sin matices, como planos de un solo tono, viene dada porque me interesa recalcar la vertiente puramente formal de las obras. De hecho, aun cuando no rechazo el uso del color (la mayoría de las piezas son en B/N, pero no todas), el uso del mismo es siempre con una exposición muy alta, quedando los colores “quemados”, y, consecuentemente, uniformes, sin tonalidades.

Las piezas se exhibirían sin marco de ningún tipo. Y es aquí donde se introduce una variación de la serie, dotando a esta de un sesgo escultórico que es permitido por el uso del “dibond”. Este material, aún rígido, es fácilmente maleable, dado que está compuesto por dos chapas que entremedio tienen un compuesto tipo plástico. Esto permite cortar la superficie impresa y, sin desgajar la parte cortada, realizar pliegues. Estos pliegues, me permiten introducir una tercera dimensión en el juego formal ya desarrollado en las obras precedentes.
Además, el uso de una determinada iluminación para estas piezas de corte escultórico, hace que los pliegues proyecten sombras sobre la propia obra, que, combinadas con los tonos saturados propios de la fotografía, creen un juego de apariencias en el que resulta difícil discernir entre la sombra real y lo fotografiado. Así, a través de estos pliegues y sombras, se crea una segunda piel formal sobre la primera.

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